Angie va camino de la posada. El camino es largo, nevoso y frio y apenas pueden avanzar y no cuando Frank regresaron a la ciudad que lo hicieron por un camino alternativo y rápido ya que el carruaje no puede ir al lado del rio porque el camino está lleno de piedras y es angosto. Se asoma por la ventana del carruaje cuando de repente, entre la oscuridad, percibe una sombra que se mueve rápidamente. Se asusta y deja de mirar por la ventana. ¿Qué extraña figura será la que merodea por los bosques? ¿Serán espíritus del bosque?
De repente el carruaje se atasca en la nieve y el caballo no puede ni avanzar ni retroceder.
-“¡Vamos caballo inútil! ¡Tira!”- grita el carrocero mientras azotaba con el látigo al caballo-“¡Muevete!”
El caballo se levanta sobre sus patas delanteras tirando al suelo al carrocero, rompe las sujeciones y riendas y escapa. Angie se empieza a preocupar y sale para ayudar.
-“¡Señor!... ¿¡Está bien!?...”- pregunta a Angie mientras ayuda a levantar al carrocero
-“¡Maldita sea! ¡Te convertiré en carne de caballo y se los daré a los perros! ¡¿Me has oído?!”- grita enfadado y tira una piedra con la intención de darle al caballo desbocado-“¡¡¡Vuelve aquí!!!”
-“¡Calmese señor! ¡Solo está asustado!”
-“¡Señorita Angie! ¡Metase dentro del carruaje! ¡Hay muchos peligros en el exterior!”- comenta el carrocero-“Descansaremos aquí mientras que yo voy en busca del caballo. Haga fuego, así ni los osos ni los lobos vendrán a atacarnos”
-“Está bien señor…”
El carrocero coge una espada y se va en busca del caballo para traerlo de vuelta o quizás acabar con su vida.
Como sabeis John se escondió en el maletero y estaba helado de frio. Así que decidió salir.
-“¿John?... ¿No te había echado Susan?... ¿Cómo has llegado?...” – habla Angie
-“Si me echó… Creias que te iba a dejar escapar y además en la ciudad no iba a hacer mucho así que me escondí en el maletero quizás para ayudarte en la posada. ¿Qué ha pasado?... Espera te ayudaré a hacer una hoguera. Estoy congelado… urrr”
-“El caballo se desbocó al quedarse atascado el carruaje… pero la culpa es del carrocero que le estaba atizando con el latigo”
-“¡Ays!... es un bestia… nunca aprenderá”
-“¿Tienes una idea mejor?”- pregunta Angie
-“Como no sea que vayamos andando hasta la posada… y más que tiene mucha probabilidad de nevar”
-“¡Aún está lejos! Tardaríamos días en llegar. Aunque… cuando me fui con Frank fuimos al lado del rio para recortar y llegaba casi al molino donde molía la harina para el pan”
-“Genial… mañana iremos andando si no lo hace el carrocero”
-“¿Y mis pertenencias?”
-“¿La ropa que te hacia ponerte Susan?... yo la quemaría… son horrorosos y no me gustan ni para ti salvo si quieres ir disfrazada a una fiesta”
-“Jajajaja”- rien ambos
Sus miradas se cruzaron tiernamente.
-"Vamos Angie... Acurrucaté entre mis brazos... Hace mucho frio"- comenta John y Angie obedece.
Mientras Jonnas caminaba con Daniela por el mismo camino que hizo el carruaje para buscarla y entregarle el medallón. La tormenta de nieve arreciaba fuertemente,
-“¡Joder!... ¡Qué frio hace!... A este paso no vamos a llegar nunca… ¿No te parece Daniela o prefieres descansar un rato?”
Daniela asiste con la cabeza
-“¡Esta bien!... ¡Descansaremos! ¡Mañana será otro día!”- comenta Jonnas mientras se baja de Daniela- “¡Uh! Esta cueva está genial para esconderse y no pasar frio”
Jonnas mete a Daniela en la cueva para evitar que cualquier animal salvaje pudiera acabar con los dos. Hace una hoguera para calentarse.
-“Daniela… ¡No me mires con cara de tristeza!... ¡Mañana veremos a Angie y le entregaré el medallón! Si quieres te puedo dejar con ella que seguro que le hará falta para poder trabajar… Tranquila chica…”
A la mañana siguiente, Angie se despierta dentro del carruaje sin noticias aún del carrocero.
-“John… despierta… el carrocero no ha vuelto…”
-“Uhhh… déjame…”
-“¡¡¡John!!!”- grita Angie enfadada
-“¡¡¡Qué!!!...Oh… Angie… ¿Qué ocurre?”- se asusta John
-“¡Ah!... El carrocero no ha vuelto y me estoy preocupando pero por lo que veo tu única preocupación es de seguir durmiendo”- contesta Angie
-“Quizás se lo hayan comido los osos… jajaja… tranquila… seguro que vuelve… o por lo menos con el rabo entre las piernas”
-“Muy gracioso John… no me hace ninguna gracia”
-“Está bien Angie… saldré a buscarlo… arrrghh”- contesta John mientras se estira para espabilarse.
-“Haré café mientras”
-“¡Perfecto! Y ten cuidado… Toma este cuchillo por si alguien o un animal se acerca… Si es un ciervo… no dudes en matarlo… tengo hambre”- habla John y le da un beso en la mejilla
John va en busca del carrocero y Jonnas ve a lo lejos un carruaje atascado en la nieve.
-“¿Será ella Daniela? Vamos a ver si tienen algo para comer”
Jonnas se acerca y ve salir a una joven del carruaje.
-“¿Hola?”- pregunta Jonnas
-“¡Ahhh!¡No te!... ¿Jonnas?”- se asusta Angie mostrando un cuchillo
-“¿Angie? ¿Qué ha pasado?”
Angie le cuenta lo sucedido y que John ha ido a buscar al carrocero.
-“¡Quedate aquí! Voy en busca de tu amigo John y del carrocero. Me llevaré a Daniela”
-“¿Has robado a Daniela?”
-“No… digamos que usé el dinero del Sr. Frank para quedármela… exactamente… robo no es…”- comenta Jonnas mientras sube-“Ten cuidado”
-“Gracias… tu también”
-“¡Vamos Daniela!¡Arrr!”
Daniela se pone a cabalgar para buscarlos.
John descubre que el carrocero estaba tumbado en el suelo y le da la vuelta.
-“¡¡¡AAAAHHH!!!”- se asusta John al ver que el carrocero estaba muerto probablemente de hipotermia al salir a buscar al caballo pero de este, ni rastro...
Quizás el caballo fuera devorado por alguna bestia salvaje… Así que John no se iba preocupar mucho del animal pero sí de que se quedarían tirados y de no saber cómo continuar.
-“Yo no me preocuparía más del tema… Esta muerto… Deja que la naturaleza haga su trabajo”- habla Jonnas desde lo alto de la loma a lomos de Daniela
-“¿¿¿¿Quién eres???”- se asusta John-“¿¿¿Qué es lo que quieres???”
-“Tranquilo… me llamo Jonnas… He visto que os habéis quedado tirados en la nieve con el carruaje atascado. Puedo ayudaros con Daniela”
-“Da… ¿Daniela?... pero si es la yegua del Sr. Frank… Espera un momento… ¡¡¡TU!!!... ¡¡Tu eres ese ladrón!!”- grita John
-“¡Ays!”- suspira Jonnas-“Si no quereis que os ayude… Estareis perdidos en el bosque y quizás tengáis el mismo final que el carrocero. He comprado a Daniela y no la he robado. Además han despedido a todos los empleados y van a sacrificar a todos los caballos gracias a Susan… ¿O es así como se llama la nueva “dueña” de la casa Blossom?”
-“¿¿¿Cómo sabes todo eso???” –grita John furioso
-“¿No te acuerdas de tu nefasto cumpleaños que casi acabó en tragedia?... Estuviste en el calabozo toda la noche. Tomas intentó violar a tu amiga… o digamos novia… y yo la salvé. Me la llevé a mi guarida para que se recuperara y después la llevé de vuelta a casa… Creo que me merezco un agradecimiento por tu parte si no tu serías comida para los buitres”- contesta Jonnas-“Me estoy impacientando y hemos dejado sola a Angie en el carruaje. Olvidate de los dos… volvamos”
-“¡¡No la toques!! ¡Te estaré vigilando!”
-“Nunca la he tocado ni la tocaré. Es tuya… sube y volvamos”
Tanto John como Jonnas regresan con Angie.
-“¡¡John!! ¡¡Jonnas!! ¿Y el carrocero?”- pregunta Angie
-“Está muerto…” –contesta Jonnas mientras se baja de Daniela
-“¿Cómo ha muerto?”- pregunta Angie preocupada
-“De frio… anoche hizo un frio tremendo… Olvidate… Desayunemos y después nos pondremos en marcha. He cazado esta liebre por el camino. Nos alimentará por un rato hasta llegar a la posada”- contesta Jonnas
John actuaba de vigilante y mostraba un alto grado de desconfianza hacia Jonnas.
-“John… ¿te ocurre algo? ¿Por qué esa desconfianza hacia él? ¡Nos ha salvado de morir de frio!”
-“Tranquila Angie… no pasa nada…”- contesta John
-“Come John… o te desmayarás por el camino… Vamos…”- habla Jonnas mientras le acerca un plato con un poco de liebre.
-“Está bien… gracias Jonnas y te pido disculpas…”- contesta John aunque no quiere bajar la guardia por si las moscas
-“Angie… Aquí tienes el amuleto que te quitó Susan”
-“¡Mi amuleto!... Gracias Jonnas”- habla Angie
-“No hay de qué… Por cierto… ¿Cómo os conocisteis? Por animarnos un poco antes de continuar”
Angie le contó cómo se conocieron y todas las trastadas que cometió John mientras trabajaba en la mansión.
Después, entre Jonnas y John removieron la nieve de la llanta que estaba atascada del carruaje.
-“Para poder sacar el carruaje, hace falta aliviar peso… Sino Daniela sufrirá”- comenta John a Jonnas
-“Pues… ¿a qué esperamos?” – habla Jonnas
Bajaron el maletero del carruaje y aliviaron peso para poder poner a Daniela a tirar del carro. Lo malo es que, como el otro rompió los anclajes y riendas, había que usar un poco la imaginación para poder amarrarla.
-“¡John!... ¡Jonnas!... Encontré cinturones dentro del maletero… Quizás os sea útil”- comenta Angie mostrando unos cinturones que había dentro.
-“También podría servir todos los trapos para reforzar… Ya te dije que no te haría falta… Gracias Angie”- comenta John
Hizo jirones la ropa mientras Angie se reía.
-“¡Vamos Daniela! ¡Tira guapa!”- grita Angie mientras los otros dos empujaban por detrás
-“¡¡¡AAARRRRFFFFF!!!” – exclaman mientras empujan
Les costó pero al final lo consiguieron
-“¡Bravo Daniela! ¡Buena chica!... ¡SIIIII!... Jaja”-salta de alegría Angie mientras la abraza-“¡Ya está!... ¡Lo hemos conseguido!”
Daniela suspira aliviada. Continuaron el viaje y llegaron al fin a su destino. La chimenea de la posada estaba encendida y Angie no podía esperar a bajarse.
-“¡¡¡Padre!!!¡¡¡He vuelto!!!...¡¡¡Padre!!!”- grita Angie mientras se acercaba corriendo a la puerta
-“¿Angie?” – habla el padre que estaba dentro y sale a la puerta-“¡¡¡ANGIEEEEEEE!!!!¡¡¡¡POR LOS DIOSES!!!! ¡¡¡¡HAS VUELTO!!!!”
Angie y su padre se funde en un profundo abrazo a miradas de los otros dos.
-“¿Qué ha pasado?... ¿Por qué has vuelto?... ¡Pasa dentro!... Hace frio… ¿Y quiénes son esos dos?”- pregunta a Angie mientras la abrazaba
-“Te lo contaré todo… pero te presento a John y a Jonnas… me han ayudado a salir de aquella horrible vida… mi vida está aquí contigo padre… no debí de irme… snif”- comenta Angie con lágrimas en los ojos mientras el padre acariciaba el rostro de ella.
-“¡Oh Angie!... ¡Mi querida Angie!... Tu madre murió hace unos días y ahora estoy solo… pero me alegro mucho que hayas vuelto… snif… Me has alegrado mi tristeza. Pasad todos adentro… snif”
-“Encantado de conocerle señor”- saluda John-“Dejaré a Daniela en el establo con su permiso”
-“Si… sin problemas… “- comenta el padre- “Estais invitados. Con estas nevadas me he quedado aislado y no tengo mucho que ofreceros salvo salir de caceria”
-“Un placer señor”- saluda Jonnas y le da la mano- “Soy un buen cazador y aquí no faltará la comida”
-“Perdonarme mi nombre es Louis Ardenson… un placer teneros a ambos”
John dejó a Daniela en el establo con comida y porque el agua tenían que descongelarla para que pudiera beberla.
Todos pasaron al comedor donde Angie preparó un estofado de caza para entrar en calor.
La tormenta empezó a arreciar y nevaba muy fuerte con vientos huracanados así que había que apestillar los ventanales para evitar que rompieran los cristales.
Mientras el padre, John y Jonnas se sentaron a la lumbre de la chimenea para conversar. John no bajaba la guardia ni un segundo de Jonnas mientras tomaba un poco de vino en un vaso.
-“Hablame un poco de ti John”- comenta el padre
-“Tenía una finca de 5 hectáreas con unas llanuras impresionantes que perderías la vista y llegaba hasta el acantilado. Me pasaba las horas muertas y me tiraba desde lo alto para bañarme… Era impresionante. Tenía caballos salvajes pero los cuidaba como si estuvieran en el establo… Me gusta verlos corretear por la finca. Mi madre siempre se enfadaba porque llegaba empapado pero era lo que me gustaba y mi padre hacía la vista gorda con humor a pesar del enfado de mi madre.
Una noche mi padre me comentó que había enfermado y que una de dos, vendía la finca para poder medicarse o morirse. Así que tuve que malvenderlo a un noble pero no fue suficiente dinero y falleció. Mi madre, al ver que falleció, se suicidó desde lo alto del acantilado.
Así que, sin dinero y sin futuro, tuve que irme a la ciudad.
Vi en la casa Blossom la oportunidad de trabajar, así que le pregunté a uno de los empleados por si necesitaban a algún ayudante de establos. Me pasaron hablar con el encargado y Angie se encargó de todo hasta que la rufiana de Susan despidió a todos para quedarse con la mansión y los caballos gracias al alguacil”- habla John
-“Siento muchísimo oir todo eso muchacho… lamento lo de tus padres”- comenta el padre-“¿Y de ti Jonnas?”
-“Bueno… señor Ardenson… lo mío… puede dolerle pero se lo comentaré al igual que ha hecho John… No le voy a mentir y menos delante de Angie”- comenta Jonnas
-“Habla… te escucho muchacho”- habla el padre
-“Mis padres eran muy pobres y no podían hacerse cargo pero tenían un corazón muy grande para mí. Murieron de la peste abrazados en la cama. Ni la muerte les llegó a separar. Así que tuve un poco que mendigar por las calles hasta que un guarda me cogió y me llevó al orfanato por orden del rey.
Cuando cumplí los 18 años, me echaron de nuevo a la calle y me dijeron que me buscara la vida como a un perro. Fui buena persona dentro pero fuera no podía hacer nada… Así que la única salida era robar o morirse de hambre. Pero usted está en la misma situación que lo estaban mis padres así que nunca he robado a los pobres sino a los nobles y ricos de Irivia.
Una noche, mientras John celebraba su mayoría de edad y Angie se divertía. Escuché atentamente a Tomas, el sobrino del alguacil que lo echaron de Auldelae por su nefasta gestión como alguacil y que de repente le nombraron capitán de la guardia de la noche a la mañana, que iba a violar a Angie contra su voluntad. No lo consiguió gracias a que le di con un palo de madera que encontré en la calle y la rescaté mientras John estaba encerrado en el calabozo por su borrachera”
-“Jajajaja”- se rie el padre- “¡Este muchacho sí que es valiente!… No me importa que seas un ladrón pero te agradezco que ayudaras a mi hija. Lamento también lo de tus padres”
El padre le pone la mano encima a Jonnas ya que le inspiró confianza y valentía pero a John no le hizo tanta gracia.
-“Descansemos… mañana será otro día”- comenta el padre-“Hay suficientes habitaciones para los tres. Os encantará”
-“Se lo agradecemos de corazón señor Ardenson”- agradece Jonnas
Angie se fue a su antigua habitación donde aún seguían allí los dibujos que hacía cuando tenía cinco años y que su madre los guardó para recordarla siempre.
-“¿Aún no los has olvidado?”- comenta el padre
-“No, padre… no”- habla Angie-“¿Cómo murió mi madre?”
-“De neumonía Angie… el doctor no pudo hacer nada más… Estaba muy debilitada”- contesta el padre entristecido-“Desde entonces, llevo cuatro días sin poder superarlo. Está enterrada al lado del molino donde te pasabas horas y horas jugando. Hasta que regresaste y al fin, puedo tenerte a tu lado para siempre y lo que me quede de vida hija”
-“No te preocupes padre… te cuidaré al igual que cuidé del Sr. Frank”- contesta Angie y le da un abrazo
-“Descansa cariño… Sé que estás agotada… Habrán sido muchos días muy duros”- le da un beso en la mejilla y la acaricia.
A la mañana siguiente Angie se acercó a la tumba de su madre y de repente el medallón se volvió a iluminar y apareció el fantasma de su madre.
-“¿Madre?”
-“¡Angie! Por fin regresaste a casa… Ahora mi alma puede descansar en paz. Hablé con Margaret en el cielo y veo que te encargó una misión de descubrir qué fue de su hija Abbie y quién realmente te trajo al mundo. Pero veo que ya has descubierto una parte… el camino sigue siendo largo y difícil… Sigue descubriendo la verdad… la verdad…la verdad…la verdad…”- habla el fanstama y se desvanece
-“Angie… ¿otra vez hablando sola?”- comenta John
-“¡Era mi madre!… dice que siga buscando la verdad y a Abbie para que Margaret no siga sufriendo en el limbo. Sé que ella si puede descansar en paz pero Margaret aún no”- contesta Angie enfadada
-“¡Por los dioses Angie!... ¡Te estás volviendo loca!”
-“No estoy loca John… Alguien me tuvo que traer al mundo y ella saber qué fue de su hija. Quizás tenga que volver a la ciudad y salvar a Moly antes de que la justicia haga su parte… Perdona”- habla Angie y le da esquinazo
-“Está bien Angie… regresaremos a la ciudad. Pero si te descubre Susan, te enviará al internado de Victoria y eso no suena muy agradable”
-“Asumiré el riesgo… ya soy mayor”- contesta Angie girando la cabeza
Angie regresa a la posada donde el padre y Jonnas mantienen una agradable conversación.
-“Perdona Jonnas un momento… Angie… ¿te ocurre algo?”- comenta el padre
-“Necesito regresar a la ciudad ya que dejé algo pendiente allí”
-“¿El qué cariño? ¡No quiero perderte de nuevo!”- contesta el padre-“Ha pasado mucho tiempo… me gustaría poder estar a tu lado siempre. Sé que te preocupa saber la verdad... Ven… te enseñaré algo que guardé cuando te abandonaron. Esta fue la carta que venía en tu cesto… ¿crees que es de tu verdadera madre?”
-“No lo sé padre… por eso necesito regresar… gracias”- contesta Angie mientras coge la carta.
Angie lee la carta y se derrumba porque la letra no fue escrita por su madre sino por Susan.
-“¿Qué ocurre?”- pregunta el padre
-“Reconozco esta letra… no es de mi madre… ¡Es verdad!… fue Susan quién me abandonó pero ella no es mi madre sino una ama de llaves que envió a la hija del Sr. Frank al Centro Layre en contra de su voluntad al igual que iba a hacer conmigo. Me lo contó el encargado antes de salir de la mansión”- contesta Angie-“Susan es el demonio y envió a la pobre Moly a que la ejecutaran dentro de poco por brujería cuando ella nunca ha hecho ningún hechizo contra la casa Blossom. Solo porque rezaba a otros Dioses y no a los nuestros. ¡Padre!... ¡Por eso tengo que regresar para salvar a Moly!”
-“¡Tranquila hija mia!... Tienes razón… pero hasta que no amaine la tormenta de nieve… no puedes ir. Además no será la única persona sentenciada a muerte… Vamos… dame un abrazo… pronto se solucionará todo”
El padre le da un abrazo a Angie que no paraba de llorar. Jonnas se enteró de todo y le dio mucha pena. De algún modo él también tenía que volver y ayudar a Angie ya que era muy peligroso infiltrarse entre los muros del castillo de Irivia y más habiendo guardas y por supuesto su amigo el alguacil.
A la mañana siguiente temprano y tras dos días de tempestad, mientras John y Jonnas descansaban en la posada, el padre entra a la habitación de Angie:
-“Angie… despierta… vamos a cazar a un ciervo… llevamos dos días sin poder comer”
-“Ummm…. Es muy temprano padre…”- contesta Angie medio dormida-“Está bien… dame tiempo para refrescarme e iremos”
-“Te espero abajo… hay que alimentar a los invitados”
Angie y su padre caminan hacia el bosque en busca de un ciervo hasta que de repente un oso hambriento hace su aparición para atacarles a ambos. Los dos corren para ponerse a salvo cuando Angie resbala de un pie y cae rodando ladera abajo.
Angie cae inconsciente pero cuando se despierta, ve a un hermoso caballo negro que le miraba fijamente a los ojos y probablemente preguntándola si está bien. Fue un amor a primera vista. Angie no se lo piensa dos veces y sube a lomos de él malherida y con una brecha en la frente.
ILUSTRACION ALEJANDRO LOPEZ BERMEJO |
Mientras su padre la llamaba angustiado a voces hasta que el mismo oso se percata de su presencia y ataca al padre que estaba solo e indefenso. Angie al oír su grito cabalgó tan rápido mientras su padre se debatía entre la vida y la muerte entre gritos de dolor mientras que el oso le mordía y arañaba su pierna.
Llegó a tiempo y le cortó el cuello al oso que salió corriendo como alma que lleva el diablo.
Angie no sabía qué hacer y su padre angustiado, le pidió que le cortara la pierna o se iba a morir allí. Así que lo hizo, montó a su padre en el caballo y cabalgaron rápido hacia la posada.
Mientras John y Jonnas esperaban en la posada a que regresaran de la cacería.
-“Bien Jonnas, ahora que no está ella delante… cuando regresemos a la ciudad… no quiero volver a verte y ni siquiera ponerle más las manos a Angie. Aún no me has contado del todo qué hiciste con ella cuando estaba en tu escondite. Así que ya puedes contarme la verdad o de aquí no sales vivo”- habla John
-“No le hice nada… estaba inconsciente. ¿Qué es lo que piensas? ¿Que me aproveché de ella? ¿Es eso?... Desde que te vi tirado al lado del cadáver del carrocero, me has estado vigilando y desconfiando. Si no fuera por mí… Angie no estaría viva y Tomas se hubiera salido con la suya”- contesta Jonnas
-“¡¡¡MIENTEEEESSSS!!! AAARRRGGGGHHHH”- John se lanza con un cuchillo de la cocina contra el cuello de Jonnas
-“¡¡Venga hazlo!! ¡Cuando vea Angie lo que has hecho o peor aún su padre, seguro que te colgará del molino”-contesta Jonnas intentando respirar mientras que John le agarra del cuello-“¿A qué estás esperando? Eres una gallina asustada John. De todas formas nadie me echará de menos y menos que aquí no hay nadie”
De repente se abre la puerta y aparece Angie y su padre que se estaba desangrando
-“¡¡¡¡QUE ES ESTO!!!!¡¡¡¡ DEJAD DE PELEAROS Y AYUDARME!!!”- grita Angie y John tira el cuchillo al suelo.
-“¡Por los dioses! ¡Qué os ha pasado a los dos!... ¿Y su pierna?”- habla John asustado
-“¡¡¡NO TE QUEDES AHÍ PARADO Y MUEVETE!!!¡¡¡ AYUDAME A PONERLO ENCIMA DE LA MESA JOHN!!!”- grita Angie llorando-“¡¡¡JONNAS BUSCA HILO PARA CERRAR EL RELLENO DE LOS ASADOS, AGUJA, UN TRAPO Y AGUA CALIENTE EN LA COCINA!!!¡¡¡RAPIDO O SE MUERE!!!”
Jonnas corre apresuradamente a buscar todo lo que le ha pedido Angie para suturar la herida sangrante y evitar que su padre muera ya que era lo último que le faltaba.
-“¡Padre! ¡Tranquilo… estás en casa!”
-“He traido whisky para el dolor… Tambien es un buen desinfectante. Lo hago a menudo cuando me hago alguna herida importante. Beba un trago señor Ardenson”- comenta Jonnas-“Angie… tranquilízate… todo saldrá bien”
-“Será mejor que prepare el carruaje para llevar a tu padre a que lo vea un doctor por si tuviera una infección”- comenta John
-“¿¿¿A qué esperas???”- grita Angie llorando desesperada
John corre hacia el establo para preparar a Daniela con el carruaje hasta que se encuentra con el caballo que ha traido a los dos a salvo.
-“¿Tu…de… dónde has salido chico? Pareces un caballo salvaje”- pregunta John-“Parece que eres fuerte… Daniela es débil y no creo que corra mucho… Ven conmigo. Necesito que lleves el carruaje”
El caballo sigue a John y se deja poner todos los anclajes y riendas.
-“Vaya… eres muy buen chico…”
El caballo asiente con la cabeza y lleva el carruaje a la puerta de la posada.
El padre traga un poco de whisky mientras Angie procede a suturar la herida y a continuación echa un poco del mismo en la herida para desinfectar.
-“¡¡¡¡AAAAAAAAAAAAAAAAAGGGGHHHHHHHHHHH!!!!!”- grita el padre-“¡¡Angie!!...¡¡Ayudame!!...¡¡Aagh!!”
-“Padre tranquilo… John ha ido a preparar el carruaje para ir a la ciudad”
-“Angie… Jonnas… Ya está listo… ¡Vamonos!”
-“John, échame una mano… lo llevaremos entre todos. ¿Has dejado la puerta del carruaje abierta?”-Habla Jonnas
-“Si claro…”-contesta John-“He tirado un colchón en el suelo del carruaje… Hay que darse prisa… Viene otra tormenta”
-“Y… ¿Daniela?”- pregunta Angie
-“Me la llevaré yo Angie… Tu ve con John y con tu padre”- comenta Jonnas-“Te necesita más que nunca”
Inician la marcha y cabalgan tan rápido como pueden hacia la ciudad.
Al llegar a la ciudad, John llega hasta la puerta de la casa del doctor que atendía a Frank. Por supuesto que ya había regresado de sus vacaciones en Auldelae, así que John golpea fuertemente la puerta mientras la tormenta hace su entrada de nuevo con fuerza. El padre de Angie está muerto de dolor y también del viaje.
-“¿Quién va a estas horas de la noche?”- comenta el doctor que baja apresuradamente por las escaleras.
-“¡¡Doctor!!¡¡ Soy John!!¡¡Abre la puerta!!¡¡Al padre de Angie le ha atacado un oso en la pierna!!”- grita John desde la puerta
-“¡¡Por los dioses!!”- exclama el doctor que abre la puerta-“¡¡Pasadlo a la camilla, rápido!!... ¿Angie? ¿No te… había mandado Susan al internado?”
-“¡¡Por favor, doctor, dejemos ese tema para después y salve a mi padre!!... Esto es todo lo que he podido coger del negocio que tiene mi padre… no es mucho… pero espero que pueda ayudarme”- comenta Angie entre lagrimas
-“Deja el dinero… Voy a atender a tu padre como atendí al Sr. Frank. Quédate con Laura en el salón”- comenta el médico rechazando el dinero-“Vamos… tranquila… ya está en buenas manos”
-“Vamos Angie. Ven a sentarte a la lumbre y te prepararé algo”-comenta Laura, la esposa del Doctor
-“Mami… ¿qué es lo que pasa?”- comenta Nur, la hija de Laura que se despertó de todo el alboroto y que bajaba dormida por las escaleras
-“Cariño… no pasa nada… vuelve a la cama cielo”- comenta Laura y le da un beso en la frente.
-“Angie… me tengo que ir… aquí no puedo estar por mis antecedentes…”- comenta Jonnas tras dejar al padre en la camilla-“Sé fuerte… Mañana te diré a qué hora condenan a Moly… Siempre se puede protestar antes de la condena “
-“Gracias por todo Jonnas”-habla Angie y le da un abrazo
-“Siento haberte amenazado Jonnas… estamos en paz… por ahora”-comenta John y le da la mano pero Jonnas no se la da porque no está contento con él.
Jonnas regresa a su guarida y mientras el doctor está ocupado atendiendo al padre.
Una hora más tarde, el doctor regresa un poco manchado de sangre para conversar con Angie sobre el estado de su padre.
-“Angie… has hecho un buen trabajo suturando la herida… pero me quedaré de guardia con él por si surge alguna complicación. Está bastante débil y necesita descansar. Arriba hay un par de habitaciones más de invitados cuando vienen nuestros familiares a visitarnos. Tranquila… lo malo ya ha pasado”
-“Gracias Doctor por atendernos a estas horas… y respondiendo a su pregunta… el encargado me envió de vuelta a la posada donde el Sr. Frank me recogió cuando era pequeña porque no quería que Susan me controlara como lo hizo con Abbie”
-“Entiendo”- comenta el doctor-“¿Aún sigues pensando qué fue de Abbie? Quizás pueda ponerte en contacto con alguien que trabajaba en el Centro Layre y así terminar de una vez por todas”
-“Se lo agradecería eternamente”- contesta Angie un poco más aliviada
-“Está bien… John… hay un almacén al lado de casa para dejar a los caballos. Ten, esta es la llave. Asegúrate que esté bien cerrada ya que no quiero que entren vándalos para llevarse mis pertenencias”
-“Si señor”- contesta John y sale fuera para resguardar a los caballos del frio.
-“Angie… por mí puedes quedarte todo el tiempo que necesites… eres mi invitada al igual que John y tu padre”- comenta el doctor
-“Gracias doctor”- comenta Angie
Angie se acerca a su padre convaleciente para despedirse.
-“A…AA…Angie…aaagg”- habla su padre en voz baja y entre dolores
-“Padre… ya está… se acabó… necesito descansar y tú también… seguro que te recuperarás pronto y podremos volver a la posada”- comenta Angie entre lágrimas, le acaricia su padre y le da un beso en la frente.
-“Angie… déjalo ya… vete a descansar”- comenta el doctor-“Tranquila… me ocuparé de él toda la noche. Si quieres mañana te quedas con él. Tiene fiebre a causa de la infección… No sabemos cuántos cadáveres se alimentan esas bestias y la de virus y bacterias que tendrán en las propias mandíbulas”
Angie se va con Laura para descansar preocupada por saber si su padre superará o no esa noche.
John se acerca al dormitorio de Angie en el cual ve a ella sentada en el borde la cama y muy entristecida por lo ocurrido.
-“Angie… tranquila… el doctor está con él”-consuela John a Angie-“Ven… acércate…”
Angie se acerca a los brazos de John.
-“¿De dónde ha salido ese caballo?”-pregunta John para animar un poco a Angie-“Es un caballo muy fuerte pero parece que está enfermo”
-“No lo sé… Me caí rodando ladera abajo y, cuando desperté, estaba su hocico delante de mi cara”- contesta Angie entre sonrisas y lagrimas
-“Bueno… si nadie lo reclama… deberías de quedártelo… así Daniela podría tener un potro fuerte. Jejeje”-comenta John- “Vamos Angie… anímate… se está haciendo tarde y deberías de descansar y no estar de guardia pensando si va a salir o no de esta. Mañana será otro día y seguro que tu padre ya estará dando guerra”
John se despide de Angie con un beso en la mejilla y se va.
Unos cazadores encuentran el cadáver en descomposición del carrocero y restos del carruaje. Así que regresan a la ciudad para informar al alguacil.
- “¿Un cadáver?”- pregunta el alguacil
- “Si alguacil mayor… un cadáver… pero del carruaje solo estaba el maletero y los asientos. De la chica que usted habla… nada”-habla el cazador
- “Lo más que me extraña es que por qué iría en dirección contraria en vez de ir hacia Victoria”- comenta mosqueado el alguacil apoyando sus puños sobre la mesa-“Gracias por todo… informaré a la Sra. Susan… Quizás alguien la haya raptado contra su voluntad”
- “Si alguacil mayor”- habla uno de los cazadores
- “Enterrad el cadáver”-comenta el alguacil-"Maldita sea...GRRRRR"
- “Me encargaré yo y la traeré de vuelta tio…”- comenta Tomas mientras toma un vaso de whisky-“Para eso va a ser mi futura esposa… oh… ¿no?”
- “¡¡¡ ¿Tu?!!!... Eres un…”- grita el alguacil enfurecido-“Está… bien… llévate un par de hombres y tráela a rastras si hace falta. Mata a su captor sin dudarlo. La llevaremos a Victoria en un carruaje de presidiario e informaremos a Susan de su llegada”
- “Ahora mismo… Vamos”-comenta Tomas y se va con dos guardas a buscarla
- “Hubiera colgado a esa zorra en su momento en vez de mandarla al internado… jejeje”- habla el alguacil a solas mientras se pasea por el despacho
Mientras, en el despacho del rey, Maurus está leyendo todas las sentencias de muerte programadas y entre ellas la de Moly que se retrasó más de un mes cuando debería de haber sido una ejecución rápida por insistencia de la reina Audele de perdonarle la vida. El rey era el que tenía la última palabra de ejecutar o no al preso. Solo bastaba su firma.
-“Majestad… La reina desea una audiencia”-comenta un guarda
-“Comentale que pase”
-“Si majestad”
-“Audele… ¿Aún sigues pensando en no ajusticiar a Moly?”- pregunta Maurus mientras está firmando las sentencias
-“Maurus… Escuchame por última vez… Ella ha sido declarada culpable por el consejo de justicia. Me da pena y creo que deberías de…”
-“¿¿¿Deber que…??? Sabes que me juego la corona y quedaría muy mal parado delante del consejo de nobles. No les haría mucha gracia”-contesta malhumorado el rey-“Ya hemos hablado de esto y retrasado su ejecución en dos ocasiones. No espero más… Hay que hacer cumplir la ley aunque duela”
-“Quizás perdonarle la vida y aunque si no quieres que siga aquí, desterrarla de Irivia”-comenta la reina
-“¡Arf!... Cariño… eres la reina… soportas el mismo peso que yo… ¿Entiendes?”- se levanta y abraza a la reina para consolarla-“Será mejor que mañana estés presente ante las ejecuciones públicas. Las haremos en la Plaza en vez de en la sala de Ajusticiamientos... Hace falta reformarla para hacer allí el consejo”
La reina Audele se va entristecida porque el rey firmará, sin su aprobación, la sentencia de Moly.
Por la mañana los guardas gritan los nombres de los ajusticiados, la hora y el lugar. Entre ellos, se encontraba por desgracia Moly. Jonnas se enteró enseguida y se lo dijo a Angie.
-“Hay que estar allí para evitar que el verdugo queme en la hoguera a Moly”-comenta Angie a Jonnas
-“Angie… es muy peligroso… y habrá muchos guardas… Si te ve el alguacil, podría meterte en el carruaje o matarte en el acto. Olvídate… piensa que ella va estar mucho más feliz con los Dioses que seguir viviendo. Bastante ha sufrido”- habla Jonnas
-“¿No decías que hay que disfrazarse para la fiesta?”- comenta Angie
-“Está bien… haz lo que quieras… será tu “suicidio” pero yo no voy a estar allí para salvarte si te pasa algo”- habla Jonnas intentando convencer a Angie de que no lo haga y se va por la ventana.
Mientras John fue a ponerle herraduras al caballo que encontró Angie cuando de repente se encontró a Tomas junto a las gemelas bastante bebido.
-“¡Hombre John!... ¡Qué sorpresa! ¡Hic!... ¿Dónde has estado? ¿Y Angie?... ¿Te las tirado y luego la has matado? ¡Hic! Porque mira que bellezas tengo en cada hombro las cuales me he divertido durante toda la noche follando… ¡Hic! ¿A que sí bellezas? Muack… muack…muack…muack”- habla Tomas borracho mientras les toca el trasero a las gemelas
-“¡Ah!...Jijiiji”- rien las gemelas del general John-“Qué malo eres Tomas… jijiji”
-“¡Estás borracho!... ¡Yo no he tocado a Angie! Y sigue viva y junto con su padre. Mirate… das asco. No me extraña que te echaran de Audeale”- comenta John
-“¿Me perdonáis bellezas? ¡Hic! Tengo que ajustarle un poco las cuentas a este tipejo ¡hic!”- deja a las gemelas y saca una navaja de su bolsillo-“Jejeje… ¡hic!... Venga… pelea… a ver si eres hombre… si no… la pobre Angie viajará tan lejos que no la verás jamás… venga...¡hic!... a qué esperas”
Tomas incita a John a pelear con él pero viendo que no se movia, toma la iniciativa
-“AAARRRGGGHHHH MUEEEEREEEEEE… AAAHHHHHH”- se abalanza Tomas pero no se da cuenta de que la tapa del alcantarillado está abierta y cae de pie a la alcantarilla-“¡ME LA PAGARÁS!… ¿ME OYES?... ¡RAPTARÉ A ANGIE Y LA METERÉ EN EL CARRUAJE A VICTORIA CAPULLO MALCRIADO!”
-“Susan… vámonos a casa… ¡Se acabó Tomas!… si quieres volver a vernos… ven oliendo a rosas y no a pocilga”- habla una de las gemelas mosqueada.
John prosigue la marcha y llega al herrero Alfred, bastante envejecido pero como un chaval. El mismo que herraba la yegua del Sr. Frank.
-“¡John! ¡Qué agradable sorpresa! ¿Cómo estás?”
-“Estoy bien Alfred… Te traigo a este impresionante caballo para que le pongas unas buenas herraduras. Ten cuidado… es un caballo salvaje”
-“Tengo experiencia… no te preocupes. ¿Y Angie? ¿Sabes algo de ella? Desde que se fue de la mansión ya no es lo mismo. Susan me debe mucho dinero y ya le he dicho que no me hago cargo más de los caballos. Las apuestas han bajado muchísimo y los caballos están muriendo de hambre y sed”
-“Maldita zorra…”- suspira John- “Angie está bien y está con su padre con el doctor que atendía al Sr. Frank”
-“¿Qué ha ocurrido?”-pregunta Alfred
-“Su padre fue atacado por un oso y ha perdido una pierna mientras iban de caceria”- contesta John
-“Yo también tengo una pierna de acero pero lo mío fue por enfermedad cuando era un crio… Es mucho mejor que de madera que acaba apulgarándose, astillándose o lo que es peor infectarte con carcoma o que te coman las termitas”-comenta Alfred-“Puedo hacerle uno. Solo necesito el diámetro de su pierna sana y adaptarle uno. Se lo regalaré… bastante ha sufrido Angie. Además mantendré mi palabra de no desvelar dónde está Angie. El alguacil ha puesto precio a su cabeza bien por información o bien que alguien la traiga para llevársela a Victoria. Aunque seguramente torturará a más de uno si alguien se calla”
-“Le doy las gracias Alfred”- habla John
-“No hay de qué muchacho. Cuando lo acabe, me acercaré a adaptárselo y a ayudarlo a caminar de nuevo”
John regresa de nuevo a la casa del doctor con el caballo ya herrado.
Llegó el día y la multitud se agolpaba en la plaza. Los guardas impedían que los críos menores vieran la ejecución por su dureza y les ofrecía ir a la escuela para evitar el dantesco crimen. Además tenían orden del alguacil por si aparecía Angie de arrestarla y llevársela inmediatamente.
Suenan los tambores y las trompetas, haciendo su llegada a los reyes de Irivia junto con los nobles del consejo de justicia y un representante que leerá uno por uno los cargos que se le imputa a cada ajusticiado mientras la multitud gritaba la muerte de los presos.
De nuevo suenan y es el turno de llegada de los presos. Mucha gente les escupía, insultaban y gritaban mientras que dos guardas por preso, los sacaba y los llevaba de los hombros hasta atarlos a cada uno en cada columna de cada hoguera donde el verdugo quemará vivo a los presos delante de la multitud. También hacia su presencia el alguacil junto con Tomas, un poco más sobrio para guardar las formas delante de la multitud y por su supuesto de sus majestades.
También había algunos nobles entre ellos Susan que no se perderá el espectáculo de ver arder a Moly.
Por su parte, Angie se escondió entre la multitud y consigue ponerse casi en primera fila sin que los guardas se percaten de su presencia
Audele mostraba una tristeza tremenda cuando llegaba Moly y veía como la ataban a la columna. Maurus empezó a preocuparse…
El representante del consejo de justicia, pidió silencio para poder leer los cargos.
-“¡SRA. MOLY TANTANO! ¡SE LE DECLARA CULPABLE DE BRUJERÍA, PRACTICAR MAGIA NEGRA Y CAPTAR ADEPTOS COMO PASÓ CON LA SEÑORITA ANGIE BLOSSOM, LA CUAL SIGUE AÚN DESAPARECIDA DESDE HACE UN MES! ¡SERÁS QUEMADA VIVA TAL COMO VIENE ESPECIFICADA EN LA LEY Y QUE LOS DIOSES DECIDAN SU DESTINO FINAL! ¡SI ALGUIEN TIENE ALGO QUE DECIR EN CONTRA DE ESTA SENTENCIA!… ¡QUE HABLE AHORA!”
-“¡¡¡YO!!!”-grita Angie
La multitud hace un corrillo y los guardas se dan cuentan y la cogen de los brazos. Tanto Susan, como el alguacil como Tomas se quedan sorprendidos de su presencia
-“¡¡¡SOLTADME!!!”-grita Angie
-“¡¡¡GUARDAS!!!... ¡¡ES UNA ORDEN!!... ¡¡SOLTADLA!!”- grita Maurus-“¡¡SEÑORITA ANGIE!!... ¡SUBA Y COMENTE POR QUÉ NO DEBEMOS AJUSTICIAR A MOLY!”
Los guardas sueltan a Angie y el representante ayuda a Angie a subir al escenario que habían montado delante de la hoguera. Moly respira llorando por momentos.
-“Majestad… Moly no ha hecho nada conmigo… Este amuleto se lo dio mi madre. Ella es inocente y no se debería condenar a una persona solo porque reza a Dioses distintos. Es muy buena persona y ella me ha cuidado desde que el Sr. Frank… snif…”-habla entre lágrimas Angie
-“Continua… tranquila… Señorita Angie…”- comenta el rey Maurus
-“¡Ella me ha cuidado desde pequeña mientras que la Sra. Susan se ha dedicado a intentar apropiarse de todas las propiedades que la casa Blossom ha estado ganando con duro trabajo durante generaciones!... Y no lo ha planeado sola… ¡sino también con el alguacil!”
La gente exclama y el alguacil se mosquea. Tomas se retira entre las sombras y Susan se desmaya.
-“¡¡¡GUARDAS!!!¡¡¡ARRESTEN A ESTA CHICA POR MENTIROSA!!!¡¡¡SE TE VA A CAER EL POCO PELO QUE TE QUEDARÁ CUANDO TE LLEVE A VICTORIA!!!”- grita el alguacil
-“¡¡¡ALGUACIL!!!¡¡¡ALTO AHÍ!!!”-grita el rey-“¡¡LARGATE Y NO QUIERO VERTE MÁS POR IRIVIA!!¡¡ SE ACABÓ!!¡¡ YA NO SERÁS MÁS EL ALGUACIL!!¡¡GUARDAS!!¡¡ECHÉNLO!!”
-“¡¡SI SEÑOR!!”- comenta uno de los guardas
El alguacil se va cabreado y coge a Tomas de la oreja para llevárselo. Nunca más podrá ejercer mano dura en Irivia pero si tenía asegurado el mercado de opio para poder subsistir.
-“Señorita Angie… ¿estás diciendo la verdad?”- pregunta uno del consejo de justicia
-“Si señor… Tengo una carta que estaba dentro del diario de Margaret en la que le decía a Abbie que ella era la legitima heredera pero tampoco sé qué fue de ella tras ser ingresada en el Centro Layre aquí en Irivia”- contesta Angie y le da la carta a uno del consejo de justicia
-“Cierto es… Es la letra de la fallecida Margaret… Pero no hay más herederos salvo usted señorita Blossom. Necesito hablar un segundo con el resto a ver qué podemos hacer”- habla y se retira un momento
Al rato ya tienen otro veredicto para Moly:
-“Señorita Angie… Hemos debatido sobre el veredicto de Moly y no hemos hallado ningún indicio de que practique brujería. No obstante, si fuera cierto, la sentencia se ejecutará. Así que pediré a su majestad que sea puesta en libertad inmediatamente. Usted es la legítima heredera si nadie lo reclama. Enhorabuena señorita Angie Blossom… ejem… Excelentísima diría yo. El Sr. Frank es un respetable de la nobleza”- habla y le muestra la mano para sellar la paz.
-“¡TRAS EL SEGUNDO VEREDICTO! ¡DECLARO A LA SEÑORA MOLY TANTANO NO CULPABLE DE LOS CARGOS DE BRUJERÍA! ¡QUE SEA PUES PUESTA EN LIBERTAD!”- grita el rey Maurus, la multitud aplaude, los guardas cortan las cuerdas que mantenían atada a Moly al bastago de la hoguera y da gracias a los Dioses por darle una segunda oportunidad
Tanto Angie como Moly, lloran de alegría y se funden en un profundo abrazo. La reina se levanta y también llora de alegría…
Angie y Moly saludan cortésmente a la reina. John y Jonnas se alegran de que por fin Moly esté libre y así poder conocer el paradero de Abbie pero a los otros dos ajusticiados se les retrasó otra vez su sentencia. Habia que celebrar este momento y no matar a nadie.
Susan recobró el conocimiento pero los guardas se encargaron de llevársela a rastras a ojos de la nobleza hacia el carruaje que la llevaría a Victoria, que hubiera sido el camino que Angie hubiera tomado en contra de su voluntad.
Mientras tanto, en la casa del doctor, Angie sorprende al doctor con la presencia de Moly y le comunica que la casa Blossom vuelve a estar en sus manos.
Tanto el doctor como Laura, se alegran. Su padre, ya un poco más recuperado y en la cama, no entendía nada…
-“¡Padre!... ¡Se han llevado a la Sra. Susan a Victoria!... ¡La mansión es mía!... ¡Vende la posada y vente a vivir conmigo! ¡Por favor!”
-“Angie… la posada es mi vida… también la tuya… la mansión es muy grande para que tú puedas llevarla sola… Además… ¿Qué harás con los caballos?... Están todos gravemente enfermos y deberían de sacrificarlos”
-“Los recuperaremos… ¡Ten fe en mí padre!… Convertiré la mansión en una posada para la nobleza de otros lugares y ganaremos mucho más dinero. Tengo a Moly que se conoce toda la mansión de arriba a abajo”
-“Tienes mucha imaginación Angie… mira la realidad… ¿Qué te hace más feliz? ¿Estar con tu padre o la mansión?”- comenta el padre-“Alimentar a esos caballos se lleva mucho más dinero que lo que ganas en la posada. Echa cuentas… no es tan difícil”
Angie se retira entristecida… pero Moly habla:
-“Señorita Angie… con o sin usted… la mansión volverá a funcionar como un reloj… John se encargará de cuidar de los caballos. Haga caso a su padre… le necesita” –le pone la mano en el hombro a Angie-“Podrá venir siempre y cuando quiera a la ciudad. Gracias por salvarme la vida. Sigue tu camino para conocer la verdad”
-“Gracias Moly”- contesta Angie y le da un abrazo.
Al día siguiente Alfred viene con una protesis de acero que ha fabricado y se lo adaptará a la pierna del padre para ver si encaja o había que darle unos retoques.
-“Encaja a la perfección”- comenta Alfred
-“¡Vaya!... ¡Estoy muy feliz!... ¡Tengo ganas de ponerme de pie y echar a correr para abrazar a mi hija! ¡Muchísimas gracias Sr. Alfred!”- habla el padre-“Es usted un genio”
-“Con tranquilidad Sr. Ardenson… Aún tiene usted que aprender a caminar con él como lo hago yo con el mío… jajaja… se lo agradezco”
-“Tendrá que seguir usando las muletas Sr. Ardenson pero veo que dentro de poco las quemará en la chimenea jajaja”- comenta el doctor-“Es un buen artilugio sobre todo para aquellos que han perdido algún miembro en las guerras. Tomaré nota”
-“¿Tengo que pagártelo? ¿No?”
-“Tranquilo Sr. Ardenson… considérelo cortesía de la casa”
-“¡Oh!... Muchísimas gracias”
Angie visita por última vez la mansión, antes de regresar a la posada ya con los primeros brotes de primavera, que estaba bastante abandonada gracias a Susan y se dirige a la tumba donde descansa los restos de Margaret.
-“Margaret… He recuperado la casa pero aún no he hallado a Abbie o donde puede estar. Seguiré buscándola hasta encontrar algo que me aclare qué fue de ella y quién es mi madre”
Angie se va y inician el regreso a la posada no sin antes despedirse de John que se queda a cargo del cuidado de los caballos junto con un par de empleados. Él sería el nuevo encargado.
FIN DEL CAPITULO